sábado, 28 de febrero de 2015

El Voto en El Salvador

El Voto en El Salvador

Esto parece estro.

“y lo que leí realmente más que una redacción periodística parece una vergüenza y una voz de desesperación como un impío sacando al final de la historia sus últimas cobardías”





A todos los que están fuera del país, y han podido apreciar y aprender sus sistemas no sólo electorales sino también en todos los otros ámbitos que se desarrollan en un país, un país constituido.
Me gustaría poder expresar algo de los pensamientos que se generan al ver el “revoltijo” que aquí se genera en estos días, sobre todo desde que la izquierda asumió “el poder” en este pequeño país. Antes de eso, la campaña sucia solamente se vivía en las vísperas a las elecciones, y mayormente en elecciones presidenciales, ahora, la campaña sucia cubren las páginas y las columnas de los periódicos los prácticamente trescientos sesenta y cinco días del año, así como los spot televisivos, grandes pancartas en las carreteras, volantes, blogs en internet, redes sociales etc., etc..


Esto parece estro, durante el año, el desprestigio continúa, la difamación está a la orden del día, y las críticas ya no son neutrales. Oh si lo fueran! quizás nunca las han sido, y los que las han hecho de ese modo son expulsados de los medios.


La competitividad es buena, pues desarrolla aptitudes de superación en la persona, pero si de competitividad se pasa a codicia y ambición, allí es donde empieza el problema, pues la ambición esta linkeada a la traición, lo cual vuelve a aquel que la posea en una persona despreciable e indigna y de muy poca credibilidad.


Y así hemos visto pasar los años aca, El Salvador, un país donde no fue sabido  con exactitud el monto en millones de dólares que se generan en impuestos por cada año fiscal, y obviamente tampoco sabes con exactitud como son invertidos, o las donaciones de países altruistas y no tan altruistas.


Como un escritor llamó a su obra, maldito dinero. Una pregunta que seria excelente si se llevase a la realidad y a los medios públicos nacionales y extranjeros, me pregunto yo, habría el mismo afán que actualmente hay si a los que corren por esas posiciones de poder en los distintos organismos gubernamentales tuvieran un salario similar al del resto de profesionales en el país? o si hubiera un sueldo base, metas establecidas para reflejar su trabajo, el cual sería a su vez público (dado que son puestos y fondos públicos los que se usan)? Pienso que no serían los mismos, pienso quien dirige un país debe ser un líder, y no un ambicioso al dinero o al poder o a la fama, pues de ser así, no sería su motivación el bienestar de la constitución, sino que eso quedaría en los últimos y más miserables quehaceres, los cuales solo serian para justificar fondos públicos gastados que obviamente no reflejaran la realidad.
Sería entonces eso lo que mueve tanto alboroto en lo que aquí aún llamamos “política”? dólares contantes y sonantes que van de una cuenta a otra, de un estado a otro, es decir de público a privado. Es eso lo que mueve tanto afán? Es eso lo que genera la las cartas enviadas de un lado a otro, sin perspectiva ni fundamento, esas columnas llenas de rencor?

Recientemente he encontrado esas “desprestigiosas” letras publicadas en periódicos, que realmente más que una redacción periodística parece una verguenza y una voz de desesperación como un impío sacando al final de la historia sus últimas cobardías no teniendo más que hacer ante su inminente y penosa derrota. La hipocresia parece resonar en cada pagina, en cada altavoz, la hipocresía parece andar por el aire y por las redes como un virus que al menos, muchos solo lo vemos pasar ridículamente como el que lo porta e intenta transmitir, teniendo éxito sólo en los más débiles muchas veces.